Olvidarte de este sencillo gesto cuando haces una portabilidad con Vodafone, puede costarte más de 30€ al mes 

Cuando hacemos una portabilidad a otro operador, debemos asegurarnos de que realizamos el proceso respetando las directrices del operador. De lo contrario, podríamos encontrarnos con una factura sorpresa que no teníamos planificada. Esto es lo que le ha ocurrido a un usuario del operador rojo, te contamos cómo actuar en el caso de que te ocurra.

Muchos de nosotros estamos familiarizados a realizar la portabilidad a otro operador cuando encontramos una oferta mejor o un paquete de servicios que puede adaptarse mejor con nuestras necesidades. Uno de los errores más comunes que se suelen producir, y que las compañías telefónicas llevan tiempo advirtiendo, hace referencia a la necesidad de dar de baja todos los servicios contratados una vez portamos la línea. De lo contrario, podríamos vernos con alguna factura extra que no tendríamos prevista.

Esto es precisamente lo que le ha ocurrido a un usuario del operador rojo, que se ha encontrado con una factura algo superior a 30€ después de haber abandonado la compañía. El operador no ha tardado en explicar el motivo que se encuentra detrás de este gasto inesperado.

https://twitter.com/vodafone_es/status/1898013935661466087

Vodafone recuerda la importancia de desactivar todos los servicios

Cuando nos cambiamos de compañía, estamos portando nuestro número de teléfono de la compañía de origen a la de destino. Sin embargo, esto no quiere decir que todos los servicios que teníamos contratados también se cambian de operador, de hecho, no es así. Todos ellos permanecerán activos hasta que informemos a nuestra compañía de que queramos tramitar la baja. Esto es así porque no tienen una vinculación directa con nuestro número de teléfono y los procesos de baja son completamente independientes.

Vodafone informa de esta cuestión al usuario que se ha puesto en contacto con ellos informando de esta situación. Recordando que cuando hacemos una portabilidad, siempre tenemos que asegurarnos de desactivar todos los servicios no portados para evitar este tipo de situaciones. El ejemplo más habitual de servicios que no se portan automáticamente son el fijo y la televisión, pero existen muchos más y dependerá de lo que hayamos ido contratando durante los últimos años.

Revisa los conceptos de tu factura

No siempre tenemos constancia de todos los productos que tenemos contratados, especialmente si ya llevamos un tiempo con nuestra compañía. Motivo por el cual, nuestra recomendación es que antes de realizar la portabilidad, te descargues la última factura de tu operador y te asegures de que has dado de baja cada uno de los conceptos que aparecen en ella y por los que se te está cobrando.

En caso de duda, nunca está de más hacer una doble comprobación y que te asegures con tu compañía de todo lo que tienes contratado. De este modo, te asegurarás de que no te va a llegar un cargo extra una vez abandones la compañía. Además, también podrás confirmar con el operador que no tienes ninguna permanencia asociada a ninguno de estos servicios o productos y te evitarás el pago de cualquier posible penalización por haber abandonado la compañía antes de tiempo.

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