Así es Eutelsat, la compañía europea que quiere plantarle cara a Starlink

La empresa de satélites francobritánica Eutelsat ha acaparado la atención del mercado tras un aumento significativo en el valor de sus acciones esta semana, impulsado por el contexto geopolítico y la posibilidad de convertirse en un proveedor clave de comunicaciones satelitales en Europa. Su ascenso ha reavivado el debate sobre si puede ser una alternativa viable a Starlink, la constelación de satélites de Elon Musk que, de momento, domina el sector.

Eutelsat fue fundada en 1977 por 17 países europeos con el objetivo de desarrollar una infraestructura de telecomunicaciones satelital independiente de Estados Unidos y la Unión Soviética.

En 1983, se convirtió en el primer proveedor europeo de televisión por satélite y, tras su privatización en 2001, ha evolucionado hasta posicionarse como el tercer operador satelital más grande del mundo. En 2023, la compañía se fusionó con OneWeb, adquiriendo una constelación de satélites en órbita baja similar a la de Starlink.

Eutelsat VS Starlink

Actualmente, Eutelsat opera una flota de 35 satélites geoestacionarios y 654 satélites de órbita baja, que ofrecen internet en zonas remotas y en situaciones de emergencia. Sin embargo, la diferencia con Starlink sigue siendo notable: la compañía de Musk cuenta con aproximadamente 7.000 satélites en activo y proporciona conectividad a más de 100 países.

A nivel técnico, los satélites de OneWeb heredados por Eutelsat operan a una altitud de 1.200 km, lo que permite una menor latencia en comparación con los geoestacionarios. Sin embargo, a diferencia de Starlink, estos satélites carecen de enlaces láser entre sí, lo que reduce su eficiencia y cobertura.

El posible retiro del servicio de Starlink en Ucrania ha llevado a considerar a Eutelsat como un reemplazo potencial. Actualmente, la compañía tiene desplegados 2.000 terminales en el país, frente a los 40.000 de Starlink. Aunque su CEO, Eva Berneke, asegura que pueden alcanzar esa cifra en pocos meses, la logística y la dependencia de terceros para fabricar los terminales podrían complicar la expansión.

Más allá de Ucrania, Eutelsat está actualmente manteniendo negociaciones con el gobierno italiano para proporcionar un servicio de comunicaciones seguras con las que, de llegar a buen puerto, Eutelsat lograría dejar a Starlink fuera de un contrato previamente negociado con la estadounidense por 1.500 millones de euros. Además, forma parte del consorcio encargado de desarrollar IRIS², la futura red de satélites europeos que entrará en operación en 2030 con una inversión de 11.000 millones de euros.

Retos financieros

Pero no todo el cielo está despejado para Eutelsat. A pesar de su reciente alza en bolsa, la compañía enfrenta dificultades financieras. En el último semestre de 2024, registró pérdidas de 873,2 millones de euros, agravando los resultados negativos de 2023. Sus ingresos aumentaron un 5,9% hasta 606,2 millones, pero la deuda neta de la compañía asciende a 2.695,8 millones de euros, como recoge Cinco Días.

El futuro de Eutelsat dependerá en gran medida de su capacidad para cerrar contratos gubernamentales en Europa y mejorar su infraestructura tecnológica. Si bien Starlink sigue siendo el líder indiscutible del sector, el impulso político y económico de la Unión Europea podría convertir a Eutelsat en un actor clave en la carrera espacial del continente. En pleno auge de un discurso favorable a la independencia estratégica de Europa, la Unión podría favorecer los contratos para Eutelsat frente a otros competidores.

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