La Administración Trump filtra planes militares en Signal después de incluir a un periodista en un chat grupal
Un tremendo fallo de seguridad ha sacudido a la Casa Blanca tras la inclusión accidental de un reportero en un grupo de Signal donde se compartía información clasificada sobre operaciones militares. Este descomunal patinazo pone al descubierto las chapuzas en los protocolos de seguridad de la Administración y deja al aire información sensible que podría comprometer objetivos estratégicos nacionales.Según ha informado The Atlantic, un periodista de dicho medio recibió por error acceso a un chat grupal de Signal utilizado por altos funcionarios de defensa para discutir planes militares clasificados. El reportero permaneció en el grupo durante días antes de que alguien se diera cuenta del desastre, tiempo suficiente para enterarse de secretos de seguridad nacional que no debería ni oler.Un error con consecuencias potencialmente catastróficasEl incidente representa una metedura de pata sin precedentes y se suma a otros desastres recientes en la administración. Este tipo de negligencia no es un caso aislado, como demuestra que Grok pasó de funcionar sin filtros a ser un títere de Elon Musk y Donald Trump, dejando claro un patrón preocupante de manejo irresponsable de tecnologías sensibles.La metedura de pata ocurrió cuando un funcionario de la Casa Blanca incluyó por error al periodista mientras creaba un grupo de Signal para coordinar aspectos de una operación militar clasificada. Durante varios días, el reportero pudo leer mensajes, ver documentos compartidos e incluso acceder a ubicaciones geográficas sensibles vinculadas a acciones militares planificadas.Captura de pantalla del chat de Signal donde se incluyó al periodista de The Atlantic por errorEl Pentágono y la Casa Blanca han puesto en marcha una investigación interna para ver qué ha pasado y cuánto daño ha causado la filtración. Los expertos en seguridad nacional con los que ha hablado The Atlantic califican el incidente de "auténtico despropósito" y advierten que podrían haber peligrado vidas humanas si la información hubiera acabado en manos enemigas.Este despiste monumental se produce justo cuando un chaval de 19 años con pasado hacker ha sido colocado al frente de la agencia de personal federal, situación que tiene al Pentágono con todos los nervios del cuerpo en tensión por toda la información privilegiada a la que tiene acceso este muchacho.Los expertos en ciberseguridad lo tienen claro: da igual lo buena que sea la tecnología de cifrado de Signal, ningún sistema puede protegerte del error humano. La Administración Trump no paraba de darse golpes en el pecho presumiendo de sus mejoras en los protocolos de seguridad, fanfarronadas que han quedado hechas trizas tras este ridículo espantoso.El uso de apps de mensajería comerciales para temas oficiales ya olía mal a los especialistas en seguridad. Si a esto le sumamos que han puesto a un veinteañero afín a Elon Musk al frente del Departamento del Tesoro con capacidad para meter mano a las cuentas federales, queda en evidencia una negligencia sistemática en la protección de los activos más sensibles del gobierno.Este desastre colosal subraya la urgente necesidad de poner orden en los protocolos de comunicación del gobierno federal. Los expertos coinciden en que hace falta un sistema más "a prueba de tontos" para la creación de grupos de comunicación con información sensible, además de obligar a todos los funcionarios con acceso a material clasificado a pasar por un cursillo intensivo de "cómo no compartir secretos militares con la prensa por accidente", especialmente aquellos que manejan información que podría comprometer la seguridad nacional si cae en las manos equivocadas.El artículo La Administración Trump filtra planes militares en Signal después de incluir a un periodista en un chat grupal fue publicado originalmente en Andro4all.

Un tremendo fallo de seguridad ha sacudido a la Casa Blanca tras la inclusión accidental de un reportero en un grupo de Signal donde se compartía información clasificada sobre operaciones militares. Este descomunal patinazo pone al descubierto las chapuzas en los protocolos de seguridad de la Administración y deja al aire información sensible que podría comprometer objetivos estratégicos nacionales.
Según ha informado The Atlantic, un periodista de dicho medio recibió por error acceso a un chat grupal de Signal utilizado por altos funcionarios de defensa para discutir planes militares clasificados. El reportero permaneció en el grupo durante días antes de que alguien se diera cuenta del desastre, tiempo suficiente para enterarse de secretos de seguridad nacional que no debería ni oler.
Un error con consecuencias potencialmente catastróficas
El incidente representa una metedura de pata sin precedentes y se suma a otros desastres recientes en la administración. Este tipo de negligencia no es un caso aislado, como demuestra que Grok pasó de funcionar sin filtros a ser un títere de Elon Musk y Donald Trump, dejando claro un patrón preocupante de manejo irresponsable de tecnologías sensibles.
La metedura de pata ocurrió cuando un funcionario de la Casa Blanca incluyó por error al periodista mientras creaba un grupo de Signal para coordinar aspectos de una operación militar clasificada. Durante varios días, el reportero pudo leer mensajes, ver documentos compartidos e incluso acceder a ubicaciones geográficas sensibles vinculadas a acciones militares planificadas.

Captura de pantalla del chat de Signal donde se incluyó al periodista de The Atlantic por error
El Pentágono y la Casa Blanca han puesto en marcha una investigación interna para ver qué ha pasado y cuánto daño ha causado la filtración. Los expertos en seguridad nacional con los que ha hablado The Atlantic califican el incidente de "auténtico despropósito" y advierten que podrían haber peligrado vidas humanas si la información hubiera acabado en manos enemigas.
Este despiste monumental se produce justo cuando un chaval de 19 años con pasado hacker ha sido colocado al frente de la agencia de personal federal, situación que tiene al Pentágono con todos los nervios del cuerpo en tensión por toda la información privilegiada a la que tiene acceso este muchacho.
Los expertos en ciberseguridad lo tienen claro: da igual lo buena que sea la tecnología de cifrado de Signal, ningún sistema puede protegerte del error humano. La Administración Trump no paraba de darse golpes en el pecho presumiendo de sus mejoras en los protocolos de seguridad, fanfarronadas que han quedado hechas trizas tras este ridículo espantoso.
El uso de apps de mensajería comerciales para temas oficiales ya olía mal a los especialistas en seguridad. Si a esto le sumamos que han puesto a un veinteañero afín a Elon Musk al frente del Departamento del Tesoro con capacidad para meter mano a las cuentas federales, queda en evidencia una negligencia sistemática en la protección de los activos más sensibles del gobierno.
Este desastre colosal subraya la urgente necesidad de poner orden en los protocolos de comunicación del gobierno federal. Los expertos coinciden en que hace falta un sistema más "a prueba de tontos" para la creación de grupos de comunicación con información sensible, además de obligar a todos los funcionarios con acceso a material clasificado a pasar por un cursillo intensivo de "cómo no compartir secretos militares con la prensa por accidente", especialmente aquellos que manejan información que podría comprometer la seguridad nacional si cae en las manos equivocadas.
El artículo La Administración Trump filtra planes militares en Signal después de incluir a un periodista en un chat grupal fue publicado originalmente en Andro4all.