No tires los botes de Nescafé vacíos: así se pueden reutilizar para organizar la cocina y pequeñas despensas

Hay un envase cuya forma ha quedado en nuestro recuerdo durante varias generaciones: los botes de café soluble de Nescafé, con cuerpo de cristal con una onda característica al estilo guitarra y tapa de plástico. Aunque ha sufrido alguna que otra modificación y están disponibles en varios tamaños, tienen una estética de lo más característica y única. Presentes en muchas cocinas a lo largo de los años, una vez se acaba el café que albergan, puedes tirar la tapa y el cuerpo al reciclaje, pero estarás desaprovechando todo su potencial porque lo mismo te sirve para transformarlos en una jabonera de diseño que para convertirlos en bonitas lámparas. Pero incluso puedes reciclarlos sin salir de la cocina como botes de almacenaje. De bote de café gastado a bote para conservar alimentos Desde que he visto todo lo que se puede hacer con un bote de café vacío, ya no los tiro y tomo nota para el próximo, que en este caso en realidad es un viejo conocido: en mi casa no será ni la primera ni la última vez que, después de lavarlo y quitarle la pegatina, lo usamos para guardar almendras. Tienen un buen tamaño, una forma bonita y además los materiales empleados en su construcción son aptos para uso alimentario (¡faltaría más!). La guinda del pastel es que pese a que tienen bastante capacidad, no ocupan demasiado, por lo que vienen de lujo en cocinas y despensas pequeñas para guardar pasta, legumbres, frutos secos, etc. Como además es fácil acumular unos cuantos, tener una balda llena de botes de Nescafé reutilizados queda estéticamente armónico. Vía: crafts_cm Pero lo que @crafts_cm propone en su cuenta de Instagram es otro nivel, porque los tunea para que queden bastante más bonitos que su apariencia, robusta y funcional pero bastante simple. No soy especialmente manitas, pero me he animado a probar: solo hace falta un trozo de papel o papel adhesivo, pintura en spray, una cuerda y cola. Vía: Crafts_cm Con los botes limpios, secos y desprovistos del etiquetado original, primero recortamos en el papel adhesivo un círculo, cuadrado, una estrella (o más fácil, buscamos una pegatina con esa forma) y lo pegamos en la zona central. Luego pintamos todo el exterior cubriendo todos los recovecos. Al retirar la pegatina o papel adhesivo con cuidado, quedará un espacio transparente. Vía: Crafts_cm Aquí hay dos opciones: o después colocamos una etiqueta con el producto que vamos a guardar o no y que sean nuestros propios ojos los que lo vean. Para la tapa, crafts_cm propone usar un cordel y un poco de pegamento para ir trazando una espiral que lo cubra todo y así tener un acabado diferente con un punto rústico pero igualmente funcional: podrás abrir y cerrar el bote sin problema. Además, mejora el almacenamiento, optimiza el espacio en los armarios y cajones de la cocina y ayuda a tener una despensa perfectamente ordenada, sin ruido visual y mucho más almacenamiento del que teníamos al principio con todas las bolsas, cajas y cartones de los alimentos. En Xataka Smart Home | No sabía que los botes gastados de Nivea pudieran usarse así: cuatro ideas para darles una segunda vida Fotografías | Foto de Ravi Sharma en Unsplash | Vía @crafts_cm  - La noticia No tires los botes de Nescafé vacíos: así se pueden reutilizar para organizar la cocina y pequeñas despensas fue publicada originalmente en Xataka Smart Home por Eva R. de Luis .

Mar 15, 2025 - 17:57
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No tires los botes de Nescafé vacíos: así se pueden reutilizar para organizar la cocina y pequeñas despensas

No tires los botes de Nescafé vacíos: así se pueden reutilizar para organizar la cocina y pequeñas despensas

Hay un envase cuya forma ha quedado en nuestro recuerdo durante varias generaciones: los botes de café soluble de Nescafé, con cuerpo de cristal con una onda característica al estilo guitarra y tapa de plástico. Aunque ha sufrido alguna que otra modificación y están disponibles en varios tamaños, tienen una estética de lo más característica y única.

Presentes en muchas cocinas a lo largo de los años, una vez se acaba el café que albergan, puedes tirar la tapa y el cuerpo al reciclaje, pero estarás desaprovechando todo su potencial porque lo mismo te sirve para transformarlos en una jabonera de diseño que para convertirlos en bonitas lámparas. Pero incluso puedes reciclarlos sin salir de la cocina como botes de almacenaje.

De bote de café gastado a bote para conservar alimentos

Desde que he visto todo lo que se puede hacer con un bote de café vacío, ya no los tiro y tomo nota para el próximo, que en este caso en realidad es un viejo conocido: en mi casa no será ni la primera ni la última vez que, después de lavarlo y quitarle la pegatina, lo usamos para guardar almendras.

Tienen un buen tamaño, una forma bonita y además los materiales empleados en su construcción son aptos para uso alimentario (¡faltaría más!). La guinda del pastel es que pese a que tienen bastante capacidad, no ocupan demasiado, por lo que vienen de lujo en cocinas y despensas pequeñas para guardar pasta, legumbres, frutos secos, etc. Como además es fácil acumular unos cuantos, tener una balda llena de botes de Nescafé reutilizados queda estéticamente armónico.

Pasta Vía: crafts_cm

Pero lo que @crafts_cm propone en su cuenta de Instagram es otro nivel, porque los tunea para que queden bastante más bonitos que su apariencia, robusta y funcional pero bastante simple. No soy especialmente manitas, pero me he animado a probar: solo hace falta un trozo de papel o papel adhesivo, pintura en spray, una cuerda y cola.

Despegar Vía: Crafts_cm

Con los botes limpios, secos y desprovistos del etiquetado original, primero recortamos en el papel adhesivo un círculo, cuadrado, una estrella (o más fácil, buscamos una pegatina con esa forma) y lo pegamos en la zona central. Luego pintamos todo el exterior cubriendo todos los recovecos. Al retirar la pegatina o papel adhesivo con cuidado, quedará un espacio transparente.

Tapa Vía: Crafts_cm

Aquí hay dos opciones: o después colocamos una etiqueta con el producto que vamos a guardar o no y que sean nuestros propios ojos los que lo vean. Para la tapa, crafts_cm propone usar un cordel y un poco de pegamento para ir trazando una espiral que lo cubra todo y así tener un acabado diferente con un punto rústico pero igualmente funcional: podrás abrir y cerrar el bote sin problema.

Además, mejora el almacenamiento, optimiza el espacio en los armarios y cajones de la cocina y ayuda a tener una despensa perfectamente ordenada, sin ruido visual y mucho más almacenamiento del que teníamos al principio con todas las bolsas, cajas y cartones de los alimentos.

En Xataka Smart Home | No sabía que los botes gastados de Nivea pudieran usarse así: cuatro ideas para darles una segunda vida

Fotografías | Foto de Ravi Sharma en Unsplash | Vía @crafts_cm 


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