Dying Light tuvo una de las ediciones coleccionista más caras de la historia y hasta incluía tu cara en el juego... pero jamás la compraron
Tenemos a la vuelta de la esquina una nueva entrega del universo de Dying Light y todo comenzó hace ya 10 años con el primer videojuego de Techland. La desarrolladora polaca creó un mundo repleto de zombis en el que el parkour es fundamental para sobrevivir, por lo que quiso dar a conocer la obra con una campaña muy llamativa. Concretamente con My Apocalypse Edition, una de las ediciones coleccionista más caras de la historia de los videojuegos, y que costaba la friolera de 250.000 dólares que incluía cuatro copias del juego. Sin embargo, la aventura era casi lo de menos, pues existían multitud de añadidos y regalos de un valor enorme. Eran los siguientes: La posibilidad de que el comprador tuviera su rostro en el juego. Una estatua de tamaño real de un Volatile. Clases de parkour con un equipo de freerunning. Unas gafas de visión nocturna. Un viaje con todos los gastos pagados a las oficinas de Techland. Cuatro copias firmadas del juego. Un refugio de supervivencia a prueba de zombis, diseñado a medida. Techland se preocupó de añadir prácticamente cualquier cosa que se les pasase por la cabeza y, quizás, alguien a quien le sobrase mucho el dinero. Sin embargo, la realidad es que nunca nadie se atrevió a desembolsar el tremendo montante, tal y como recogen desde Insider Gaming. El medio se puso en contacto con Paulina Dziedziak, responsable de relaciones públicas de la empresa, y le desveló que el pago nunca se realizó: "Fue una estrategia de marketing y atrajo mucha atención de los medios por su naturaleza exagerada y fuera de lo común. Se diseñó para generar expectación en torno al lanzamiento del juego. ¡Y lo logró! Pero nadie la compró... ¡por suerte, supongo!" Tal y como confiesa Dziedziak, realmente Techland no tenía la esperanza de que alguien se decidiese a aflojar la cartera. Todo formaba parte de una campaña para atraer la atención del público, lo cual le sentó fenomenal a Dying Light. En VidaExtra | ¿Encontraste esta maravilla? La icónica espada Excálibur está en Dying Light, pero no aguanta ni un asalto antes de perder todo su poder En VidaExtra | 14 años después, al fin he enmendado mi error: aniquilé hordas de zombis en la mejor expansión que haya parido Rockstar - La noticia Dying Light tuvo una de las ediciones coleccionista más caras de la historia y hasta incluía tu cara en el juego... pero jamás la compraron fue publicada originalmente en Vida Extra por Juan Sanmartín .

Tenemos a la vuelta de la esquina una nueva entrega del universo de Dying Light y todo comenzó hace ya 10 años con el primer videojuego de Techland. La desarrolladora polaca creó un mundo repleto de zombis en el que el parkour es fundamental para sobrevivir, por lo que quiso dar a conocer la obra con una campaña muy llamativa.
Concretamente con My Apocalypse Edition, una de las ediciones coleccionista más caras de la historia de los videojuegos, y que costaba la friolera de 250.000 dólares que incluía cuatro copias del juego. Sin embargo, la aventura era casi lo de menos, pues existían multitud de añadidos y regalos de un valor enorme. Eran los siguientes:
- La posibilidad de que el comprador tuviera su rostro en el juego.
- Una estatua de tamaño real de un Volatile.
- Clases de parkour con un equipo de freerunning.
- Unas gafas de visión nocturna.
- Un viaje con todos los gastos pagados a las oficinas de Techland.
- Cuatro copias firmadas del juego.
- Un refugio de supervivencia a prueba de zombis, diseñado a medida.
Techland se preocupó de añadir prácticamente cualquier cosa que se les pasase por la cabeza y, quizás, alguien a quien le sobrase mucho el dinero. Sin embargo, la realidad es que nunca nadie se atrevió a desembolsar el tremendo montante, tal y como recogen desde Insider Gaming.
El medio se puso en contacto con Paulina Dziedziak, responsable de relaciones públicas de la empresa, y le desveló que el pago nunca se realizó:
"Fue una estrategia de marketing y atrajo mucha atención de los medios por su naturaleza exagerada y fuera de lo común. Se diseñó para generar expectación en torno al lanzamiento del juego. ¡Y lo logró! Pero nadie la compró... ¡por suerte, supongo!"
Tal y como confiesa Dziedziak, realmente Techland no tenía la esperanza de que alguien se decidiese a aflojar la cartera. Todo formaba parte de una campaña para atraer la atención del público, lo cual le sentó fenomenal a Dying Light.
En VidaExtra | 14 años después, al fin he enmendado mi error: aniquilé hordas de zombis en la mejor expansión que haya parido Rockstar
-
La noticia
Dying Light tuvo una de las ediciones coleccionista más caras de la historia y hasta incluía tu cara en el juego... pero jamás la compraron
fue publicada originalmente en
Vida Extra
por
Juan Sanmartín
.