El nuevo cemento está hecho con agua del mar y será un aliado contra el cambio climático
Un equipo de investigadores de la Universidad de Tecnología de Eindhoven (TU/e) ha desarrollado un sustituto revolucionario del cemento que, en lugar de emitir dióxido de carbono, lo captura. Este avance podría transformar el sector de la construcción, ya que el cemento tradicional es responsable del 8% de las emisiones globales de CO2, convirtiéndose en uno de los mayores contaminantes industriales del planeta.Según ha revelado el profesor Arno Nijhuis, líder del equipo investigador, este nuevo material utiliza un proceso electroquímico que combina arena, agua de mar (o salada) y electricidad para crear un aglutinante a base de carbonato de magnesio. La mezcla de grafeno con hormigón ya había mostrado avances en la reducción de emisiones, pero esta nueva técnica va un paso más allá al conseguir una huella de carbono negativa.Un material sostenible que captura CO2El proceso desarrollado no solo elimina la necesidad de hornos de alta temperatura que consumen enormes cantidades de energía, sino que además logra capturar 0,7 toneladas de CO2 por cada tonelada de material producido. Esta capacidad para secuestrar carbono mientras se fabrica convierte al nuevo cemento en una alternativa verdaderamente sostenible que podría revolucionar el sector de la construcción.Como demostración práctica, los investigadores ya han construido una pared utilizando este material, confirmando su viabilidad en aplicaciones reales. En China llevan utilizando alternativas al cemento tradicional durante miles de años, pero este desarrollo representa un avance significativo en tecnología moderna de materiales sostenibles.Otra ventaja destacable es que el proceso también purifica agua de mar como subproducto, añadiendo un beneficio ambiental adicional. El material resultante puede mezclarse con arena y agua para crear hormigón, manteniendo las propiedades estructurales necesarias para la construcción mientras reduce drásticamente el impacto ambiental asociado.Los investigadores están trabajando actualmente con socios industriales para escalar la producción de este cemento ecológico. Las aleaciones de nueva generación y este tipo de materiales sostenibles representan una transformación silenciosa pero fundamental en el sector de la construcción, que podría ayudar significativamente a combatir el cambio climático.Este desarrollo llega en un momento crítico, cuando la industria de la construcción busca activamente alternativas más sostenibles para reducir su huella ambiental. La combinación de una huella de carbono negativa y la utilización de recursos abundantes como el agua de mar posiciona a este material como una solución prometedora y escalable para uno de los mayores desafíos ambientales de nuestro tiempo.El artículo El nuevo cemento está hecho con agua del mar y será un aliado contra el cambio climático fue publicado originalmente en Andro4all.

Un equipo de investigadores de la Universidad de Tecnología de Eindhoven (TU/e) ha desarrollado un sustituto revolucionario del cemento que, en lugar de emitir dióxido de carbono, lo captura. Este avance podría transformar el sector de la construcción, ya que el cemento tradicional es responsable del 8% de las emisiones globales de CO2, convirtiéndose en uno de los mayores contaminantes industriales del planeta.
Según ha revelado el profesor Arno Nijhuis, líder del equipo investigador, este nuevo material utiliza un proceso electroquímico que combina arena, agua de mar (o salada) y electricidad para crear un aglutinante a base de carbonato de magnesio. La mezcla de grafeno con hormigón ya había mostrado avances en la reducción de emisiones, pero esta nueva técnica va un paso más allá al conseguir una huella de carbono negativa.
Un material sostenible que captura CO2
El proceso desarrollado no solo elimina la necesidad de hornos de alta temperatura que consumen enormes cantidades de energía, sino que además logra capturar 0,7 toneladas de CO2 por cada tonelada de material producido. Esta capacidad para secuestrar carbono mientras se fabrica convierte al nuevo cemento en una alternativa verdaderamente sostenible que podría revolucionar el sector de la construcción.
Como demostración práctica, los investigadores ya han construido una pared utilizando este material, confirmando su viabilidad en aplicaciones reales. En China llevan utilizando alternativas al cemento tradicional durante miles de años, pero este desarrollo representa un avance significativo en tecnología moderna de materiales sostenibles.
Otra ventaja destacable es que el proceso también purifica agua de mar como subproducto, añadiendo un beneficio ambiental adicional. El material resultante puede mezclarse con arena y agua para crear hormigón, manteniendo las propiedades estructurales necesarias para la construcción mientras reduce drásticamente el impacto ambiental asociado.
Los investigadores están trabajando actualmente con socios industriales para escalar la producción de este cemento ecológico. Las aleaciones de nueva generación y este tipo de materiales sostenibles representan una transformación silenciosa pero fundamental en el sector de la construcción, que podría ayudar significativamente a combatir el cambio climático.
Este desarrollo llega en un momento crítico, cuando la industria de la construcción busca activamente alternativas más sostenibles para reducir su huella ambiental. La combinación de una huella de carbono negativa y la utilización de recursos abundantes como el agua de mar posiciona a este material como una solución prometedora y escalable para uno de los mayores desafíos ambientales de nuestro tiempo.
El artículo El nuevo cemento está hecho con agua del mar y será un aliado contra el cambio climático fue publicado originalmente en Andro4all.