Adiós alfombra de baño. Esta es la nueva tendencia decorativa que se seca mucho más rápido y no requiere lavado
El cuarto de baño es uno de los lugares de la casa donde más fácilmente se acumula la suciedad. Por ello, es fundamental mantenerlo lo más despejado posible. Sin embargo, hay un elemento clásico que ha acompañado a todas las duchas y que esta nueva tendencia está a punto de dejar atrás. La alfombra de baño, un accesorio indispensable en muchos hogares, resulta esencial para evitar resbalones al salir de la ducha, impedir que el agua se disperse por el suelo o prevenir las marcas de pisadas. No obstante, también presenta varios inconvenientes, lo que ha llevado a que esta nueva propuesta llegue para reemplazar a nuestra querida alfombrilla. Se acaba la humedad y los gérmenes Foto de cottonbro studio Salir de la ducha mojado puede convertirse en un verdadero deporte de riesgo. Un resbalón puede tener consecuencias graves (incluso fatales), además de que es frecuente que el suelo termine cubierto de gotas de agua, huellas y restos de humedad. La alfombra de baño ha sido, hasta ahora, la solución a estos problemas. Sin embargo, contar con un accesorio de este tipo en el baño también conlleva ciertos inconvenientes. Por lo general, estas alfombras están fabricadas con materiales textiles como algodón, microfibra o poliéster, siendo estas las opciones más comunes. Algodón: Suave, absorbente y fácil de lavar, pero tarda más en secarse que otros materiales. Microfibra: Muy absorbente, de secado rápido y fácil de limpiar, además de ser suave al tacto. Poliéster: Resistente al moho y al desgaste, seca rápido y suele ser más económico. Espuma viscoelástica (memory foam): Proporciona una superficie muy cómoda y acolchada, aunque puede requerir más cuidados al lavarse. Nylon: Resistente al agua y de secado rápido, pero no tan suave como otros materiales. Además, existen otras alfombras fabricadas en bambú o madera tratada. Aunque son menos habituales, aportan un estilo moderno, son duraderas y resisten bien la humedad, aunque no resultan tan suaves como las textiles. El inconveniente de las alfombras de materiales textiles es que, debido a su uso frecuente en entornos húmedos, tienden a acumular humedad y, con el tiempo, acaban desprendiendo malos olores. Sin mencionar la suciedad que se acumula progresivamente, lo que obliga a realizar limpiezas muy frecuentes. Imagen | Amazon En 2025, las clásicas alfombras de ducha están cediendo su lugar a una tendencia mucho más moderna y funcional: las esterillas de piedra o alfombras de diatomita, una opción que garantiza secar los pies en cuestión de segundos sin retener agua. Ofrecen no solo comodidad adicional, sino también mayor higiene y practicidad. La ventaja frente a los materiales mencionados anteriormente es que estas alfombras absorben el agua sin permanecer húmedas. Esto se debe a que están elaboradas con materiales altamente absorbentes como la tierra de diatomeas (de donde proviene su nombre), fibras de madera y cal hidratada, una combinación de elementos naturales que proporciona una notable capacidad de absorción y facilita la rápida evaporación del agua. Ventajas que ofrecen Imagen | Amazon Esto significa que, al apoyar el pie sobre su superficie, la humedad se absorbe al instante y se evapora en cuestión de segundos, eliminando así la incómoda sensación de pisar una alfombra húmeda. Pero esta no es su única ventaja, ya que este tipo de alfombra ofrece una capacidad de absorción superior. En apenas uno o dos segundos, tus pies estarán secos y la superficie no retendrá la humedad, a diferencia de las alfombras tradicionales de tela, que deben cambiarse con frecuencia o pueden propiciar la aparición de moho y malos olores. En Xataka Smart Home Mi baño tenía arañazos. Este ha sido el inesperado producto que las ha quitado Otro aspecto positivo es que la alfombra de piedra previene la proliferación de bacterias y microbios, garantizando un ambiente más higiénico y saludable en el baño. Para su mantenimiento, basta con colocarla en posición vertical contra una pared una vez a la semana, permitiendo que cualquier residuo de agua se evapore por completo. Además, su textura ligeramente porosa actúa como un antideslizante, reduciendo el riesgo de caídas y protegiendo el suelo de arañazos, ya que muchas de ellas incluyen una base para evitar dañar el suelo. Aunque no son tan populares como las alfombras de tela, estas alfombras pueden encontrarse fácilmente en tiendas especializadas y plataformas de comercio electrónico. Están disponibles en varios tamaños, con precios que parten aproximadamente de los 12 euros. Por ejemplo, esta de Leroy Merlin cuesta 17,95 euros. SOBEAU 40X60cm Alfombra de Baño Antideslizante, Alfo

El cuarto de baño es uno de los lugares de la casa donde más fácilmente se acumula la suciedad. Por ello, es fundamental mantenerlo lo más despejado posible. Sin embargo, hay un elemento clásico que ha acompañado a todas las duchas y que esta nueva tendencia está a punto de dejar atrás.
La alfombra de baño, un accesorio indispensable en muchos hogares, resulta esencial para evitar resbalones al salir de la ducha, impedir que el agua se disperse por el suelo o prevenir las marcas de pisadas. No obstante, también presenta varios inconvenientes, lo que ha llevado a que esta nueva propuesta llegue para reemplazar a nuestra querida alfombrilla.
Se acaba la humedad y los gérmenes
Salir de la ducha mojado puede convertirse en un verdadero deporte de riesgo. Un resbalón puede tener consecuencias graves (incluso fatales), además de que es frecuente que el suelo termine cubierto de gotas de agua, huellas y restos de humedad. La alfombra de baño ha sido, hasta ahora, la solución a estos problemas.
Sin embargo, contar con un accesorio de este tipo en el baño también conlleva ciertos inconvenientes. Por lo general, estas alfombras están fabricadas con materiales textiles como algodón, microfibra o poliéster, siendo estas las opciones más comunes.
- Algodón: Suave, absorbente y fácil de lavar, pero tarda más en secarse que otros materiales.
- Microfibra: Muy absorbente, de secado rápido y fácil de limpiar, además de ser suave al tacto.
- Poliéster: Resistente al moho y al desgaste, seca rápido y suele ser más económico.
- Espuma viscoelástica (memory foam): Proporciona una superficie muy cómoda y acolchada, aunque puede requerir más cuidados al lavarse.
- Nylon: Resistente al agua y de secado rápido, pero no tan suave como otros materiales.
Además, existen otras alfombras fabricadas en bambú o madera tratada. Aunque son menos habituales, aportan un estilo moderno, son duraderas y resisten bien la humedad, aunque no resultan tan suaves como las textiles.
El inconveniente de las alfombras de materiales textiles es que, debido a su uso frecuente en entornos húmedos, tienden a acumular humedad y, con el tiempo, acaban desprendiendo malos olores. Sin mencionar la suciedad que se acumula progresivamente, lo que obliga a realizar limpiezas muy frecuentes.
En 2025, las clásicas alfombras de ducha están cediendo su lugar a una tendencia mucho más moderna y funcional: las esterillas de piedra o alfombras de diatomita, una opción que garantiza secar los pies en cuestión de segundos sin retener agua. Ofrecen no solo comodidad adicional, sino también mayor higiene y practicidad.
La ventaja frente a los materiales mencionados anteriormente es que estas alfombras absorben el agua sin permanecer húmedas. Esto se debe a que están elaboradas con materiales altamente absorbentes como la tierra de diatomeas (de donde proviene su nombre), fibras de madera y cal hidratada, una combinación de elementos naturales que proporciona una notable capacidad de absorción y facilita la rápida evaporación del agua.
Ventajas que ofrecen
Esto significa que, al apoyar el pie sobre su superficie, la humedad se absorbe al instante y se evapora en cuestión de segundos, eliminando así la incómoda sensación de pisar una alfombra húmeda.
Pero esta no es su única ventaja, ya que este tipo de alfombra ofrece una capacidad de absorción superior. En apenas uno o dos segundos, tus pies estarán secos y la superficie no retendrá la humedad, a diferencia de las alfombras tradicionales de tela, que deben cambiarse con frecuencia o pueden propiciar la aparición de moho y malos olores.
Otro aspecto positivo es que la alfombra de piedra previene la proliferación de bacterias y microbios, garantizando un ambiente más higiénico y saludable en el baño.
Para su mantenimiento, basta con colocarla en posición vertical contra una pared una vez a la semana, permitiendo que cualquier residuo de agua se evapore por completo. Además, su textura ligeramente porosa actúa como un antideslizante, reduciendo el riesgo de caídas y protegiendo el suelo de arañazos, ya que muchas de ellas incluyen una base para evitar dañar el suelo.
Aunque no son tan populares como las alfombras de tela, estas alfombras pueden encontrarse fácilmente en tiendas especializadas y plataformas de comercio electrónico. Están disponibles en varios tamaños, con precios que parten aproximadamente de los 12 euros. Por ejemplo, esta de Leroy Merlin cuesta 17,95 euros.
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Foto de portada | Lisa Anna
Vía | Jeuxvideo
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La noticia
Adiós alfombra de baño. Esta es la nueva tendencia decorativa que se seca mucho más rápido y no requiere lavado
fue publicada originalmente en
Xataka Smart Home
por
Jose Antonio Carmona
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