Ahora que sé lo que es el DRM, solo busco ebooks que no lo tengan

Aunque actualmente no soy usuario de ningún ebook, en multitud de ocasiones he descargado libros digitales de Internet, y también usé un Kindle durante años hace tiempo. Y aun así, no ha sido hasta hace poco, con la reciente polémica sobre las limitaciones que ha impuesto Amazon sobre los Kindle, cuando he conocido el concepto del DRM. Si consumes ebooks, necesitas saber qué es y cómo te afecta.

Dependiendo de la vía que uses para descargar tus libros (webs alternativas, tiendas oficiales, catálogos privados), es posible que estés comprando o descargando ebooks con DRM sin darte cuenta, y esto puede jugarte una mala pasada en el futuro. No solo los libros digitales pueden llevar DRM integrado: otros productos digitales como videojuegos, películas o música pueden llevar incorporado este código.

Se trata de un sistema que sirve para validar el uso determinado que se le está dando al producto que sea, en este caso, un libro. Es decir, el DRM, siglas de Digital Rights Management (Gestión de derechos digitales), permite a una empresa comprobar si un determinado producto se está usando de la forma que ellos consideran correcta.

Lo entendemos mejor con un ejemplo: si compras un ebook desde la tienda de Amazon para Kindle, el archivo que descargues llevará DRM, y este código incrustado puede evitar que consigas transferir el epub a otro aparato, como un PC, tablet, o ebook de marca distinta.

El objetivo de ello es, en la teoría, frenar la piratería y el uso ilícito de material protegido por copyright. Sin embargo, muchos usuarios no están de acuerdo con esta práctica, y acusan al DRM de ser una forma de opresión con la que las compañías limitan la libertad de uso de un producto que un usuario ha comprado, es decir, por el que hemos pagado.

Y es que, si de pronto quieres pasar de un Kindle a un Kobo, simplemente porque te apetece, no será plato de buen gusto encontrarte con que no puedes pasar tu librería del Kindle a este otro sistema, quedando cautivo en el ecosistema Amazon.

Restricciones excesivas

Desde la web drm.info, mantenida por varios colectivos defensores de derechos del consumidor, comparten una visión muy negativa sobre el DRM: «Esta tecnología a menudo impide a las personas realizar acciones perfectamente legales, por lo que podríamos no poder crear una colección de archivos de música adquiridos legalmente ni prestar un libro electrónico a un amigo. Incluso las copias de seguridad pueden verse restringidas», advierten.

El DRM, de esta forma, «elimina derechos y libertades fundamentales en el mundo digital. Todos los sistemas DRM tienen algo en común: otorgan a las empresas control sobre aspectos que nosotros, los propietarios, deberíamos controlar. Por ejemplo, las empresas deciden con qué frecuencia podemos reproducir las películas que pagamos y qué tipo de archivos podemos leer en nuestro lector de libros electrónicos«, avisan desde estos colectivos, señalando el DRM como una mala praxis en contra de la libertad del consumidor.

¿Cuál es la alternativa?

Desde que estoy concienciado sobre lo que es el DRM y las plataformas que lo usan, trato de descargar libros desde páginas alternativas, con bibliotecas abiertas que nos permiten descargar el archivo sin ninguna limitación. Algunos ejemplos son las webs Project Gutenberg, Standar Ebooks, Manybooks, Feedbooks (en su sección de dominio público), Open Library, Libros In, Europeana Collections o Wikisource.

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