El Papa León XIV y el Apple Watch: un pontífice adaptado a los nuevos tiempos
El Papa León XIV sorprende al llevar un Apple Watch. Descubre cómo integra la tecnología y qué significa para la Iglesia.

Desde su primera aparición pública tras ser elegido como líder de la Iglesia Católica, el Papa León XIV ha dado que hablar no solo por sus palabras, sino también por un peculiar detalle en su muñeca: un Apple Watch. El hecho ha llamado la atención tanto de fieles como de aficionados a la tecnología, disparando debates en redes sociales y foros especializados acerca de los hábitos tecnológicos del Pontífice y lo que representan en el seno de la Iglesia.
Las primeras imágenes aclaran la incógnita
El uso de dispositivos como el Apple Watch por parte del nuevo Papa no es algo circunstancial, sino que parece formar parte de su día a día. Desde fotos tomadas durante su etapa previa como cardenal, ya era posible reconocer el característico diseño del reloj de Apple en su muñeca izquierda. Especialistas en relojería, como Nick Gould, han confirmado que el Pontífice ya utilizaba este gadget antes de asumir el trono de Pedro, y ahora, como Papa, sigue apostando por la misma tecnología. Incluso, entre rumores, se comenta que el Papa León XIV también cuenta con un iPhone para su vida personal.
Durante la misa inaugural del nuevo Papa se despejaron las dudas: varios testigos y expertos pudieron apreciar claramente que el accesorio que llevaba era un Apple Watch y no otro modelo suizo clásico, a pesar de que en la presentación inicial tras el cónclave, algunos observaron un reloj de la marca Wenger. Es habitual que los cardenales, durante el cónclave, deban ignorar cualquier dispositivo tecnológico debido a la normativa de incomunicación, lo que explicaría por qué el Apple Watch no apareció en ese momento concreto.
Un Papa deportista y cercano a la tecnología
León XIV, conocido por su afición al deporte y el ejercicio físico, encuentra utilidad en las funciones del Apple Watch, como el monitoreo de la actividad diaria, el control del ritmo cardiaco y otras herramientas de salud que pueden ser clave a partir de una cierta edad. Sus antecesores han insistido en la importancia de hacer un uso responsable de la tecnología, y en ese sentido, la elección de este reloj inteligente encaja plenamente con la doctrina católica actual, que promueve la templanza y la ética en la utilización de los bienes materiales.
No hay ninguna norma del Vaticano que prohíba el uso de dispositivos tecnológicos de consumo, aunque siempre se recomienda la moderación y el ejemplo. El Apple Watch, cuyo valor puede variar según el modelo, no es visto necesariamente como un lujo, sino como una herramienta útil, especialmente para la salud y la gestión de actividades diarias. Sus características, como la detección de caídas, el análisis del sueño o la monitorización del pulso, lo convierten en un aliado razonable para cualquier persona que, como el Papa, pueda estar expuesta a ciertas exigencias físicas y de agenda.
La tecnología, una herramienta para la modernización de la Iglesia
La presencia del Apple Watch en la vida del Papa también simboliza una apertura y modernización de la Iglesia, que busca acercarse a las nuevas generaciones sin renunciar a la responsabilidad moral. El propio León XIV, en sus primeros discursos, ha hecho referencia a los retos de la inteligencia artificial y el papel fundamental de la tecnología en el mundo contemporáneo. Su ejemplo puede servir para mostrar que la fe y la innovación tecnológica no tienen por qué estar reñidas, siempre que la tecnología se utilice con criterio y sentido ético.
El caso del Papa León XIV refleja la integración natural de la tecnología en todos los ámbitos de la sociedad, incluidas las altas esferas religiosas. Su uso del Apple Watch no solo es un reflejo de su personalidad activa y actual, sino que también lanza un mensaje de adaptación y cercanía hacia una Iglesia en permanente diálogo con los cambios del mundo moderno.