La venta de placas base de gama alta se desploma, AMD domina, B650 es el rey

En un momento tan duro como el que atraviesa el hardware, donde las ventas no están remontando debido a la escalada de los precios, datos concretos de Mindfactory muestran una vez más la realidad de cómo se comportan los usuarios en este sector. Y es que la venta de placas base de gama alta se está desplomando y ni el hecho de que dos de los chipsets más vendidos dentro de AMD puedan unirse en este concepto palía el golpe que están sufriendo.

Que AMD está machacando a Intel no es noticia, es más bien tendencia en el tiempo, y los porcentajes se repiten una y otra vez realmente, apenas varían. Lo que no sabíamos hasta ahora es la disposición de esas ventas, porque, ¿cómo se segmentan las placas base por chipset exactamente?

La venta de placas base de gama alta cae preocupantemente, incluso en AMD

Para entender por qué nos centramos en los rojos y no en los azules, solo hay que mirar los números, apabullantes como poco. AMD vende el 87,36% de las unidades en placas base, mientras que Intel se queda con el 12,64%, últimos datos de la semana 19 y que se han repetido en mayor o menor medida a lo largo del año.

De hecho, estos números tienen otros llamativos, porque el precio promedio de las placas de AMD e Intel es superior en el lado de los rojos que en el de los azules con 174 dólares frente a 155 dólares, y es normal cuando tienen casi el 90% de las ventas. Y es que, además, y para cerrar este apartado, obtienen el 88,61% de los ingresos apoyándose en ese ASP mayor comentado, lo que significa que la paliza a Intel está siendo legendaria, como en los mejores tiempos de los azules.

En cuanto a sockets, AM5 vende más que todo el resto, con 950 unidades por las 260 de AM4, 150 de LGA1700 y solamente 25 unidades de LGA1851.

El chipset B650 se lleva más de la mitad del mercado y apunta a casi 2 tercios

Es un hecho que la subida de los precios, algunos prohibitivos y muy por encima de los 1.000 euros, otros bordeándolos y pocos por debajo, está haciendo que la venta de placas base de gama alta en AMD estén siendo testimoniales. Como muestra el gráfico, los modelos con chipset X870 en cualquiera de sus versiones solo logran un 7,4% de cuota, mismo valor para X670E, por lo que ambos chipsets TOP solo obtienen juntos el 14,8%.

Para compensar, B850 logra un interesante 21% de cuota, pero el que destaca por encima de todos es B650 con un 64,2%, lo cual sorprende dada la cantidad de tiempo que lleva su hermano mayor en el mercado. Esto solo evidencia que el usuario medio está optando por CPU con un consumo contenido y placas base de gama media-baja, donde el conjunto ganador es el obvio: 7800X3D o 9800X3D con placa competitiva y completa bajo el chipset B650.

El resto de la inversión se va a las gráficas en su mayoría con total seguridad, dada la escalada de los precios. Por tanto, el componente más importante de cualquier PC junto con la PSU está teniendo una menor inversión en modelos con chipset menos completos y en modelos menos capaces, debido al precio de otros componentes.

¿Cómo sabemos esto? Por el número de tarjetas gráficas vendidas semana tras semana, donde los modelos de gama alta y media alta dominan. ¿Terminarán muriendo las placas de gama alta al ver el poco tirón que tienen en su venta? No es que aspiren a ser las más vendidas, porque nunca lo han sido, pero no obtener ni una cuarta parte del pastel evidencia la situación surrealista que vive el sector, donde el usuario prioriza la tarjeta gráfica por encima de CPU TOP y placa. En el equilibrio está la virtud, ahora más que nunca.

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