Como padre estoy deseando la erradicación del iPhone en los colegios. Como tecnófilo me parece un error de bulto y tengo serias dudas

Ahora mismo, siete comunidades autónomas en España están regulando el uso y presencia de dispositivos móviles en los colegios, dentro y fuera de las aulas. Galicia y Murcia llevan la delantera, con restricciones hasta los 16 y 18 años. Apoyados por el Colegio de Médicos de Barcelona, Cataluña ha hecho lo propio. Y en Madrid ya tienen el borrador listo. Los resultados académicos post-COVID no dan mucho margen a la improvisación. La Comunidad Valenciana y Baleares también están impulsando sus propias versión de la Ley de Educación Digital que comprende el uso de pantallas en un enfoque mixto: usar la tecnología como recurso complementario, no suplementario. Porque no solo el cambio a la lectura en papel y la escritura a mano posee ventajas: reducir la presencia de un iPhone o un iPad en el aula ayuda a mitigar efectos perniciosos. Sumemos a esto otros efectos colaterales como el ciberacoso, la vulneración de información confidencial y lo más estudiado: un metaanálisis de 34 estudios encontró que el uso desordenado de pantallas se asocia con despistes constantes, con un rendimiento cognitivo más bajo. Bien con la multitarea, mal con la tarea en singular. Hacen falta, al parecer, más espacios verdes y menos hiperestímulos. Si usamos la legislación madrileña como marco, así quedan las horquillas: de 1º de Primaria hasta 3º, restricción completa. En 4º de Primaria se limita el empleo del dispositivo individual a una hora diaria. En 5º y 6º de Primaria se podría extender "siempre que sea compatible con los objetivos pedagógicos y el bienestar del alumnado". La última palabra la tienen los docentes, algo positivo pero que generará fricciones entre los más restrictivos y los más laxos. Europa legisla con la evidencia delante ¿Y cómo están las cosas en el resto de Europa? España no está sola en este debate. Un estudio realizado en Francia examinó la relación entre el tiempo de pantalla y los hábitos de sueño en estudiantes de secundaria de 11 a 12 años. Los resultados indicaron que un mayor tiempo frente a pantallas se asociaba con una menor duración del sueño. Y e asociación persistió incluso después de ajustarla por factores como el índice de masa corporal, el sexo y el nivel educativo de los padres. Dormir mal, estudiar peor. Ahora hablemos de Suecia. El país se convirtió en punta de lanza al legislar a favor de las tablets y las pantallas en general: mejor para la naturaleza y la espalda llevar un iPad en la mochila que una pesada pila de libros, ¿no? Depende. Un estudio analizó cómo el uso de pantallas se vinculaban con síntomas depresivos en adolescentes. La "poca" evidencia demostró que pasar más de dos horas diarias en redes sociales estaba asociado con una mayor probabilidad de experimentar estos síntomas. No fue así con ver la tele, mientras que jugar videojuegos solo o en grupo no mostró una asociación significativa. Una vez más, depende de la cantidad. En Applesfera Qué le pide Bruselas a Apple y qué medidas está tomando la UE pese a la amenaza de Donald Trump ¿Y qué pasa en Bélgica y los Países Bajos? Varios colegios han tomado medidas individuales. El Calvijn College implementó una prohibición de teléfonos móviles con el objetivo de mejorar la cultura social de la escuela. Tras la prohibición, se observaron mejoras en las interacciones entre estudiantes y una reducción de distracciones, lo que sugiere beneficios en el ambiente escolar y en el enfoque académico. Austria ha sido más tajante: el móvil prohibido en escuelas para estudiantes hasta los 15 años. El objetivo siempre es común: fomentar la concentración y mejorar la seguridad en las aulas. Y lo están logrando, según sondeos de 2025. Al menos no podemos decir que en la UE se esté improvisando. Más de veinte años de relación con teléfonos móviles nos preceden. El elefante digital en la habitación Expertos en salud infantil sugieren que retrasar la introducción de smartphones en la vida de los niños sería beneficioso para su desarrollo. Es algo que yo siempre he defendido y que es un clamor compartido en la retahíla de grupos de WhatsApp desde donde los padres se desahogan más que informarse. Con cuatro hijos en mi casa os puedo dar un dato incómodo: el mayor foco de enfrentamientos, discusiones y rabietas ha circunvalado en torno al teléfono móvil, al tiempo de uso, a restringirlo o no, a dejarlo en otra habitación, a usarlo solo para determinadas cosas. Recuerdo los días antes de aplicar una serie de restricciones consensuadas y debatidas que, ante el aburrimiento de "no tener nada que hacer", de no enfrentarse al aburrimiento o derivar la atención en otra tarea tan sencilla como pasear o leer cómics, se quedaban dormidos y se despertaban desorientados. Si a los padres nos resulta tan difícil crear un esquema de normas y convivencia sano, de afrontar nuestro propio riesgo de adicción ante un aparat

Mar 26, 2025 - 14:52
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Como padre estoy deseando la erradicación del iPhone en los colegios. Como tecnófilo me parece un error de bulto y tengo serias dudas

Como padre estoy deseando la erradicación del iPhone en los colegios. Como tecnófilo me parece un error de bulto y tengo serias dudas

Ahora mismo, siete comunidades autónomas en España están regulando el uso y presencia de dispositivos móviles en los colegios, dentro y fuera de las aulas. Galicia y Murcia llevan la delantera, con restricciones hasta los 16 y 18 años. Apoyados por el Colegio de Médicos de Barcelona, Cataluña ha hecho lo propio. Y en Madrid ya tienen el borrador listo. Los resultados académicos post-COVID no dan mucho margen a la improvisación.

La Comunidad Valenciana y Baleares también están impulsando sus propias versión de la Ley de Educación Digital que comprende el uso de pantallas en un enfoque mixto: usar la tecnología como recurso complementario, no suplementario. Porque no solo el cambio a la lectura en papel y la escritura a mano posee ventajas: reducir la presencia de un iPhone o un iPad en el aula ayuda a mitigar efectos perniciosos.

Sumemos a esto otros efectos colaterales como el ciberacoso, la vulneración de información confidencial y lo más estudiado: un metaanálisis de 34 estudios encontró que el uso desordenado de pantallas se asocia con despistes constantes, con un rendimiento cognitivo más bajo. Bien con la multitarea, mal con la tarea en singular. Hacen falta, al parecer, más espacios verdes y menos hiperestímulos.

Si usamos la legislación madrileña como marco, así quedan las horquillas: de 1º de Primaria hasta 3º, restricción completa. En 4º de Primaria se limita el empleo del dispositivo individual a una hora diaria. En 5º y 6º de Primaria se podría extender "siempre que sea compatible con los objetivos pedagógicos y el bienestar del alumnado". La última palabra la tienen los docentes, algo positivo pero que generará fricciones entre los más restrictivos y los más laxos.

Europa legisla con la evidencia delante

¿Y cómo están las cosas en el resto de Europa? España no está sola en este debate. Un estudio realizado en Francia examinó la relación entre el tiempo de pantalla y los hábitos de sueño en estudiantes de secundaria de 11 a 12 años. Los resultados indicaron que un mayor tiempo frente a pantallas se asociaba con una menor duración del sueño. Y e asociación persistió incluso después de ajustarla por factores como el índice de masa corporal, el sexo y el nivel educativo de los padres. Dormir mal, estudiar peor.

Ahora hablemos de Suecia. El país se convirtió en punta de lanza al legislar a favor de las tablets y las pantallas en general: mejor para la naturaleza y la espalda llevar un iPad en la mochila que una pesada pila de libros, ¿no? Depende. Un estudio analizó cómo el uso de pantallas se vinculaban con síntomas depresivos en adolescentes. La "poca" evidencia demostró que pasar más de dos horas diarias en redes sociales estaba asociado con una mayor probabilidad de experimentar estos síntomas. No fue así con ver la tele, mientras que jugar videojuegos solo o en grupo no mostró una asociación significativa. Una vez más, depende de la cantidad.

¿Y qué pasa en Bélgica y los Países Bajos? Varios colegios han tomado medidas individuales. El Calvijn College implementó una prohibición de teléfonos móviles con el objetivo de mejorar la cultura social de la escuela. Tras la prohibición, se observaron mejoras en las interacciones entre estudiantes y una reducción de distracciones, lo que sugiere beneficios en el ambiente escolar y en el enfoque académico.

Austria ha sido más tajante: el móvil prohibido en escuelas para estudiantes hasta los 15 años. El objetivo siempre es común: fomentar la concentración y mejorar la seguridad en las aulas. Y lo están logrando, según sondeos de 2025. Al menos no podemos decir que en la UE se esté improvisando. Más de veinte años de relación con teléfonos móviles nos preceden.

El elefante digital en la habitación

En Clase

Expertos en salud infantil sugieren que retrasar la introducción de smartphones en la vida de los niños sería beneficioso para su desarrollo. Es algo que yo siempre he defendido y que es un clamor compartido en la retahíla de grupos de WhatsApp desde donde los padres se desahogan más que informarse. Con cuatro hijos en mi casa os puedo dar un dato incómodo: el mayor foco de enfrentamientos, discusiones y rabietas ha circunvalado en torno al teléfono móvil, al tiempo de uso, a restringirlo o no, a dejarlo en otra habitación, a usarlo solo para determinadas cosas.

Recuerdo los días antes de aplicar una serie de restricciones consensuadas y debatidas que, ante el aburrimiento de "no tener nada que hacer", de no enfrentarse al aburrimiento o derivar la atención en otra tarea tan sencilla como pasear o leer cómics, se quedaban dormidos y se despertaban desorientados. Si a los padres nos resulta tan difícil crear un esquema de normas y convivencia sano, de afrontar nuestro propio riesgo de adicción ante un aparato predispuesto para ello, cómo vamos a exigirle a un centro escolar todas las soluciones.

Family Capturas de la herraminta Family Link, de Google

Lo que vino después podría describirse como una pequeña carrera de gato y ratón para ver cómo se saltaban las normas y cuánto tardaban en hacerlo. Cuando usaba la herramienta de Google, Family Link, creaban cuentas de Google con otros permisos, instalaban algún añadido y, en cuestión de segundos, ya volvían a tener acceso a las aplicaciones. Al menos el 'Tiempo de uso' en iPhone es mucho más seguro y difícil de vulnerar, además de contar con muchas más funciones, para establecer restricciones y bloqueos específicos por grupos de apps.

Pero lo logramos. Y parece que, por fin, los centros educativos han entendido la diferencia entre "hoy el móvil es obligatorio, hay que hacer un Kahoot y una actividad digital" y "el móvil sin argumento de uso es una herramienta innecesaria en las aulas". Parece que los colegios están alineados con el hogar. Con todos los matices de grises. Porque nada de esto es concluyente y esa es la única conclusión.

Restricciones Cómo acceder al apartado de restricciones desde iOS 18

Si se enfatiza la importancia de establecer límites claros y fomentar actividades fuera de línea para promover un crecimiento saludable, habremos dado un paso. Pero recordemos que los teléfonos también protegen y salvan vidas, erradicarlos como han propuesto algunos luditas modernos o minimalistas digitales nunca sería una solución a largo plazo. Decenas de iPhones amontonados en un cajón o una taquilla proyecta una imagen revanchista y poco dialogante.

El primer iPhone llegó al mundo en 2007. No era el primer smartphone y muchos de los que estáis leyendo Applesfera ya teníais en el bolsillo algún que otro Nokia, Sony Ericsson o Motorola. Ya intuíamos cambios y mucho más han cambiado las cosas desde entonces: el poder de influencia de la telefonía, la capacidad de captar la atención y estimular los centros de generación de dopamina.

No en vano, en los últimos años hemos vivido, incluso entre la Generación Z, el auge y resurgimiento en popularidad del iPhone soviético, una forma de llamar a un "teléfono tonto" capado de funcionalidades. Y es una buena noticia, porque implica que los usuarios mostramos proactividad a las alternativas. Y aunque es normal que surjan dudas, quizá este sea el mejor momento para tomar decisiones.

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La noticia Como padre estoy deseando la erradicación del iPhone en los colegios. Como tecnófilo me parece un error de bulto y tengo serias dudas fue publicada originalmente en Applesfera por Isra Fdez .