Sin estudios llegó a trabajar con la NASA y se hizo millonario con un programa de software para Apple, desde una cabaña en el bosque

Paul Lutus no suele salir demasiado a la calle, dado que vive aislado, pero si lo hiciese, nadie le reconocería. Sin embargo, es uno de los desarrolladores más importantes en la historia de Apple por haber creado un programa sin el cual los ordenadores serían muy distintos hoy en día. Aunque lo mejor de esta historia es cómo llegó a lograr semejante hazaña. Este hombre no tiene siquiera estudios universitarios. Por no tener, no tenía ni siquiera casa cuando se aficionó a la informática. Era un sintecho en la ciudad de San Francisco, pero su afición por la electrónica le llevo a ganarse fama entre los ciudadanos como "el electricista callejero". Hasta que su ingenio le llevo aún más lejos, trabajando para la NASA y, posteriormente, a cerrar un millonario negocio con Apple. Le echaron de casa y vivió en las calles de San Francisco Paul Lutus en una imagen compartida en los últimos años Hace casi 80 años, en la conocida Cambridge de Massachusetts, nacía Paul Lutus. De su infancia se sabe lo poco que él ha contado en diversas entrevistas o en vídeos, pero sí se conoce que no fue sencilla y que hubo un momento que cambiaría para siempre su vida: cuando abandonó los estudios. Lo hizo en séptimo grado, impulsado por obtener conocimientos por su propia cuenta, dado que no creía que en la escuela le fuesen a enseñar nada relevante. Así, empezó a desarrollar habilidades técnicas de forma autodidacta. Se compró un microscopio que, aunque reconocía que era muy malo, le sirvió para encontrar otros intereses que en la escuela nunca promovían. Incluso llegó a crear un transmisor de radio utilizando piezas de viejos televisores. En Applesfera La empleada de Apple que quiso "acabar con Steve Jobs" porque ya no podía más. Al final se convirtió en su mano derecha Sin embargo, la vida de Lutus dio un cambio radical cuando a principios de los 60, sus padres lo echaron de casa. Nunca ha revelado los motivos exactos, pero teniendo en cuenta que apenas tenía 17 años, se antoja cuando menos una historia dura. Dada la situación y que, según explicaba, "aún estaba de moda", se convirtió en vagabundo en la ciudad de San Francisco. Lejos de vivirlo como un trauma, fue parte de la contracultura que se estaba viviendo en aquella década en la ciudad californiana, inundada del movimiento hippie. De arreglar radios a ser contratado por la NASA Viviendo en la calle, Lutus se ganó fama entre los viandantes gracias a sus conocimientos de electrónica. Era frecuente que muchos acudiesen a él para que arreglase transistores de radio y televisores a cambio de unas pocas monedas que, en cualquier caso, le sirvieron para ir ganando "bastante dinero" en conjunto. El propio Lutus relataba como, "sin haber sido contratado oficialmente por nadie", había empezado a desarrollar la profesión de electricista callejero. Y todo ello sin descuidar su vena autodidacta, ya que trataba de seguir aprendiendo sobre electrónica. Durante más de una década, Lutus trató de sobrevivir en la ciudad de San Francisco con esos pequeños trabajos. Hasta que llegó la NASA en 1973… Se había corrido la voz acerca del buen ingenio de este electricista callejero y eso debió llegar de algún modo a la agencia aeroespacial, dado que consiguió un puesto de trabajo allí sin tener ni siquiera el título de educación secundaria. Lutus recordaba como el entrevistador de la NASA se mostró disconforme cuando vio que en su currículum no figuraban estudios universitarios. En ese punto, cualquiera hubiera esperado que no siguiese adelante en el proceso, pero Lutus le mostró un diagrama esquemático que él mismo había diseñado y acabó siendo contratado para diseñar las luces fluorescentes del transbordador espacial de la NASA. Llegó el Apple II y su primer gran éxito desarrollando El Apple II no sólo cambió la historia de Apple, también la de Paul Lutus Una vez finalizado aquel trabajo en la NASA, Lutus se había cansado de San Francisco. Ya no vivía en la calle, pero estaba cansado de vivir en una ciudad con tanta gente y rentas de alquiler tan altas, por lo que tomó una decisión que, nuevamente, marcaría su vida: aislarse en un bosque. Era 1977 y Apple estaba ya despegando con el que era su segundo ordenador, el Apple II. Lutus se enteró de aquello y, sabiendo de las bondades de aquel revolucionario equipo, decidió comprarlo. Aunque tenía un problema y no pequeño precisamente: en la casa del bosque no tenía electricidad. Cocinaba con fuego e iluminaba el lugar con lámparas de queroseno. Usar un Apple II era imposible sin electricidad. En Applesfera Steve Jobs "enchufó" a un amigo dentro de Apple y se convirtió en uno de los empleados más misteriosos de la empresa No obstante, Lutus estaba convencido de querer aquel

Abr 13, 2025 - 17:02
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Sin estudios llegó a trabajar con la NASA y se hizo millonario con un programa de software para Apple, desde una cabaña en el bosque

Sin estudios llegó a trabajar con la NASA y se hizo millonario con un programa de software para Apple, desde una cabaña en el bosque

Paul Lutus no suele salir demasiado a la calle, dado que vive aislado, pero si lo hiciese, nadie le reconocería. Sin embargo, es uno de los desarrolladores más importantes en la historia de Apple por haber creado un programa sin el cual los ordenadores serían muy distintos hoy en día. Aunque lo mejor de esta historia es cómo llegó a lograr semejante hazaña.

Este hombre no tiene siquiera estudios universitarios. Por no tener, no tenía ni siquiera casa cuando se aficionó a la informática. Era un sintecho en la ciudad de San Francisco, pero su afición por la electrónica le llevo a ganarse fama entre los ciudadanos como "el electricista callejero". Hasta que su ingenio le llevo aún más lejos, trabajando para la NASA y, posteriormente, a cerrar un millonario negocio con Apple.

Le echaron de casa y vivió en las calles de San Francisco

Paul Lutus Paul Lutus en una imagen compartida en los últimos años

Hace casi 80 años, en la conocida Cambridge de Massachusetts, nacía Paul Lutus. De su infancia se sabe lo poco que él ha contado en diversas entrevistas o en vídeos, pero sí se conoce que no fue sencilla y que hubo un momento que cambiaría para siempre su vida: cuando abandonó los estudios. Lo hizo en séptimo grado, impulsado por obtener conocimientos por su propia cuenta, dado que no creía que en la escuela le fuesen a enseñar nada relevante.

Así, empezó a desarrollar habilidades técnicas de forma autodidacta. Se compró un microscopio que, aunque reconocía que era muy malo, le sirvió para encontrar otros intereses que en la escuela nunca promovían. Incluso llegó a crear un transmisor de radio utilizando piezas de viejos televisores.

Sin embargo, la vida de Lutus dio un cambio radical cuando a principios de los 60, sus padres lo echaron de casa. Nunca ha revelado los motivos exactos, pero teniendo en cuenta que apenas tenía 17 años, se antoja cuando menos una historia dura.

Dada la situación y que, según explicaba, "aún estaba de moda", se convirtió en vagabundo en la ciudad de San Francisco. Lejos de vivirlo como un trauma, fue parte de la contracultura que se estaba viviendo en aquella década en la ciudad californiana, inundada del movimiento hippie.

De arreglar radios a ser contratado por la NASA

Viviendo en la calle, Lutus se ganó fama entre los viandantes gracias a sus conocimientos de electrónica. Era frecuente que muchos acudiesen a él para que arreglase transistores de radio y televisores a cambio de unas pocas monedas que, en cualquier caso, le sirvieron para ir ganando "bastante dinero" en conjunto.

El propio Lutus relataba como, "sin haber sido contratado oficialmente por nadie", había empezado a desarrollar la profesión de electricista callejero. Y todo ello sin descuidar su vena autodidacta, ya que trataba de seguir aprendiendo sobre electrónica.

Durante más de una década, Lutus trató de sobrevivir en la ciudad de San Francisco con esos pequeños trabajos. Hasta que llegó la NASA en 1973… Se había corrido la voz acerca del buen ingenio de este electricista callejero y eso debió llegar de algún modo a la agencia aeroespacial, dado que consiguió un puesto de trabajo allí sin tener ni siquiera el título de educación secundaria.

Lutus recordaba como el entrevistador de la NASA se mostró disconforme cuando vio que en su currículum no figuraban estudios universitarios. En ese punto, cualquiera hubiera esperado que no siguiese adelante en el proceso, pero Lutus le mostró un diagrama esquemático que él mismo había diseñado y acabó siendo contratado para diseñar las luces fluorescentes del transbordador espacial de la NASA.

Llegó el Apple II y su primer gran éxito desarrollando

Apple Ii El Apple II no sólo cambió la historia de Apple, también la de Paul Lutus

Una vez finalizado aquel trabajo en la NASA, Lutus se había cansado de San Francisco. Ya no vivía en la calle, pero estaba cansado de vivir en una ciudad con tanta gente y rentas de alquiler tan altas, por lo que tomó una decisión que, nuevamente, marcaría su vida: aislarse en un bosque.

Era 1977 y Apple estaba ya despegando con el que era su segundo ordenador, el Apple II. Lutus se enteró de aquello y, sabiendo de las bondades de aquel revolucionario equipo, decidió comprarlo. Aunque tenía un problema y no pequeño precisamente: en la casa del bosque no tenía electricidad. Cocinaba con fuego e iluminaba el lugar con lámparas de queroseno. Usar un Apple II era imposible sin electricidad.

No obstante, Lutus estaba convencido de querer aquel Apple II. Su pasión por la informática estaba en pleno apogeo y, lejos de deshacerse de la idea, invirtió todos sus ahorros en el ordenador y pidió a la compañía eléctrica que tirase un cable de más de 350 metros para llevar electricidad hasta la cabaña en la que vivía.

Ya con el Apple II en casa, y fiel a su entusiasmo autodidacta, Lutus comenzó a desarrollar programas para el Apple II. El primero de ellos fue 'Apple World', un software que permitía diseñar casas en tres dimensiones. Y aquí llegó su primera gran oferta.

Un buen día, Paul Lutus recibió una carta con origen de Nueva York en la cual le ofrecían 33.000 dólares para hacerse con los derechos del programa. Dada su insuficiencia económica tras invertir todos sus ahorros en el Apple II, Lutus aceptó sin negociar una sola cifra. A la postre sería un mal negocio, pero le permitió sustentarse un tiempo. El suficiente como para dar su segundo y definitivo pelotazo.

El primer procesador de textos de Apple es suyo

Un año después de aquel primer negocio y de tener el Apple II consigo, a Paul Lutus le llegó la propuesta de una revista para escribir un artículo sobre la relatividad de Albert Einstein. Era un tema que dominaba, pero evidentemente necesitaba tener a mano cierta información y tenerla lo más ordenada y clara posible.

Writer Interfaz del extinto 'Apple Writer' diseñado por Paul Lutus

Fue entonces cuando pensó en lo útil que sería poder ordenar sus notas en el Apple II, así que se puso a desarrollar un software que fuese capaz de llevar a cabo esa tarea. Fue así como nació 'Apple Writer', un minimalista procesador de textos, pero que cumplía perfectamente con la función que Lutus esperaba.

Poco a poco, fue mejorando este software e integrándole más funcionalidades, aunque nunca con idea de venderlo a terceros y ni muchísimo menos a Apple. Sin embargo, acabó captando el interés de la firma californiana. Fue el momento en el que, a diferencia de lo que ocurrió con Apple World, Lutus quiso negociar unas condiciones más acordes en el largo plazo.

Envió un disquete por correo a la compañía para que pudieran verlo y pensó que, en el mejor de los casos, quizás le darían 100 dólares. Se equivocó de lleno… y para bien. Apple le ofreció 7.500 dólares y negociaron una cesión de derechos parcial que permitiría a Lutus quedarse con un 25% de las regalías.

Gracias a su ingenio y haber sabido negociar mejor, Paul Lutus acabó ganando 15 millones de dólares con el paso de los años, siendo el artífice de un software que acabó siendo artifice del nacimiento de avanzados procesadores de textos como Microsoft Word o, ya en la década de los 2000, Pages de Apple.

Un genio lejos del mundo corporativo

Lutus Paul Lutus es también un asiduo de los foros de Reddit

Si hay una palabra que defina bien a Paul Lutus es la fidelidad. Fidelidad a sus propios valores y principios. Pese a todos sus éxitos, reconocimientos y dinero ganado gracias a conocimientos adquiridos de forma autodidacta, se mantiene con los pies en la tierra. Tanto que nunca llegó a formar parte de ninguna gran empresa como Apple.

No sabemos si le llegaron a tentar en algún momento, pero dado su buen tino con el Apple World y luego con el 'Apple Writer', no hubiese sido de extrañar que acabase formando parte de la Apple de los 70. Sin embargo, ha preferido seguir una vida sencilla alejada de las grandes urbes.

De hecho, sigue viviendo en una cabaña en el bosque, desarrollando aplicaciones y hablando de desarrollo en general a través de su canal de YouTube. Su vida es una prueba de que no hace falta estar dentro del sistema para cambiarlo desde fuera.

Vía | Genbeta

Fuentes | Paul Lutus (YouTube) | CoRecursive | Unocero | El Confidencial | Hackaday | University of Waterloo | AtariArchives

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La noticia Sin estudios llegó a trabajar con la NASA y se hizo millonario con un programa de software para Apple, desde una cabaña en el bosque fue publicada originalmente en Applesfera por Álvaro García M. .