China está preparando una base espacial futurista, y lo va a conseguir gracias al poder del Sol

China acelera su proyecto de estación orbital de energía solar para ampliar su matriz energética renovable. Los paneles solares en órbita, capaces de generar electricidad sin interrupción, han pasado de ser un concepto teórico a una realidad en desarrollo tras completar pruebas en tierra. El cronograma inicial se ha acortado en cuatro años y ahora los responsables del proyecto han fijado el lanzamiento del primer prototipo para 2028, adelantándose a las estimaciones iniciales que lo situaban en la próxima década.Según detalla TechEblog, el sistema captará la radiación solar en el espacio y la convertirá en microondas para su transmisión a receptores terrestres. A diferencia de las instalaciones en tierra, los paneles espaciales no sufren las pérdidas por filtrado atmosférico ni se ven afectados por el clima o los ciclos de día y noche, lo que multiplica su eficiencia.Una solución que esquiva las limitaciones terrestresEl sistema chino utiliza paneles ultraligeros que se desplegarán en órbita para captar energía solar constante. La conversión a microondas (ondas electromagnéticas similares a las de los hornos domésticos pero de menor intensidad) permite que la energía atraviese la atmósfera y llegue a antenas receptoras en tierra, donde vuelve a convertirse en electricidad utilizable."Hemos superado el problema de la transmisión eficiente que frenaba este concepto desde los años 70", explica Zhou Jin, investigador principal del programa, en declaraciones recogidas por medios estatales chinos. Este avance completa otros proyectos energéticos como su tecnología renovable de gran escala y la estación submarina a 2.000 metros de profundidad.Los ingenieros estadounidenses y japoneses trabajan en conceptos similares, pero China ha invertido más de 15.000 millones de yuanes en investigación espacial desde 2020, acelerando el desarrollo. Este proyecto, junto con avances en robótica industrial y el avión supersónico que alcanzará Mach 4, forma parte de su plan quinquenal de tecnologías clave.Científicos de la NASA han mostrado interés en aplicar esta tecnología para abastecer futuras bases lunares. "La energía solar espacial resolvería uno de los mayores obstáculos para asentamientos permanentes fuera de la Tierra", señala John Mankins, ex directivo de la NASA, quien reconoce el avance chino en este campo. Además, estas estaciones podrían dar servicio a zonas rurales sin infraestructura eléctrica convencional.El proyecto se enfrenta a desafíos considerables. Los costes de lanzamiento, aunque han disminuido gracias a los cohetes reutilizables, siguen siendo altos. El montaje en órbita requerirá robots especializados y nuevos procesos de ensamblaje. Algunos expertos en seguridad, como Richard Chou de la Universidad de Stanford, cuestionan los efectos a largo plazo de la recepción continua de microondas en grandes áreas terrestres.El viceministro de Ciencia y Tecnología chino, Huang Wei, anunció en febrero de 2025 que si el prototipo funciona según lo previsto, el país planea una estación comercial operativa para 2035. Por su parte, Estados Unidos, a través del Laboratorio de Investigación de la Fuerza Espacial, ha retomado sus estudios en este campo tras conocer los avances chinos, intensificando una competencia tecnológica que tiene al espacio como nuevo escenario.El artículo China está preparando una base espacial futurista, y lo va a conseguir gracias al poder del Sol fue publicado originalmente en Andro4all.

Mar 31, 2025 - 18:32
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China está preparando una base espacial futurista, y lo va a conseguir gracias al poder del Sol

China acelera su proyecto de estación orbital de energía solar para ampliar su matriz energética renovable. Los paneles solares en órbita, capaces de generar electricidad sin interrupción, han pasado de ser un concepto teórico a una realidad en desarrollo tras completar pruebas en tierra. El cronograma inicial se ha acortado en cuatro años y ahora los responsables del proyecto han fijado el lanzamiento del primer prototipo para 2028, adelantándose a las estimaciones iniciales que lo situaban en la próxima década.

Según detalla TechEblog, el sistema captará la radiación solar en el espacio y la convertirá en microondas para su transmisión a receptores terrestres. A diferencia de las instalaciones en tierra, los paneles espaciales no sufren las pérdidas por filtrado atmosférico ni se ven afectados por el clima o los ciclos de día y noche, lo que multiplica su eficiencia.

Una solución que esquiva las limitaciones terrestres

El sistema chino utiliza paneles ultraligeros que se desplegarán en órbita para captar energía solar constante. La conversión a microondas (ondas electromagnéticas similares a las de los hornos domésticos pero de menor intensidad) permite que la energía atraviese la atmósfera y llegue a antenas receptoras en tierra, donde vuelve a convertirse en electricidad utilizable.

"Hemos superado el problema de la transmisión eficiente que frenaba este concepto desde los años 70", explica Zhou Jin, investigador principal del programa, en declaraciones recogidas por medios estatales chinos. Este avance completa otros proyectos energéticos como su tecnología renovable de gran escala y la estación submarina a 2.000 metros de profundidad.

Los ingenieros estadounidenses y japoneses trabajan en conceptos similares, pero China ha invertido más de 15.000 millones de yuanes en investigación espacial desde 2020, acelerando el desarrollo. Este proyecto, junto con avances en robótica industrial y el avión supersónico que alcanzará Mach 4, forma parte de su plan quinquenal de tecnologías clave.

Científicos de la NASA han mostrado interés en aplicar esta tecnología para abastecer futuras bases lunares. "La energía solar espacial resolvería uno de los mayores obstáculos para asentamientos permanentes fuera de la Tierra", señala John Mankins, ex directivo de la NASA, quien reconoce el avance chino en este campo. Además, estas estaciones podrían dar servicio a zonas rurales sin infraestructura eléctrica convencional.

El proyecto se enfrenta a desafíos considerables. Los costes de lanzamiento, aunque han disminuido gracias a los cohetes reutilizables, siguen siendo altos. El montaje en órbita requerirá robots especializados y nuevos procesos de ensamblaje. Algunos expertos en seguridad, como Richard Chou de la Universidad de Stanford, cuestionan los efectos a largo plazo de la recepción continua de microondas en grandes áreas terrestres.

El viceministro de Ciencia y Tecnología chino, Huang Wei, anunció en febrero de 2025 que si el prototipo funciona según lo previsto, el país planea una estación comercial operativa para 2035. Por su parte, Estados Unidos, a través del Laboratorio de Investigación de la Fuerza Espacial, ha retomado sus estudios en este campo tras conocer los avances chinos, intensificando una competencia tecnológica que tiene al espacio como nuevo escenario.

El artículo China está preparando una base espacial futurista, y lo va a conseguir gracias al poder del Sol fue publicado originalmente en Andro4all.