Muchos lo hacen sin saberlo: este simple gesto puede arruinar todas tus copias de seguridad

Las copias de seguridad son imprescindibles para que, en el desafortunado caso que tengamos algún problema con nuestro ordenador, nuestros archivos más importantes estén a salvo. Sin embargo, también es importante tener una serie de precauciones en el momento de llevarlas a cabo. 

Durante los últimos años, la inmensa mayoría de nosotros nos hemos acostumbrado a tener copias de seguridad de nuestros documentos, archivos y fotografías más importantes en nuestros discos duros. Pese a que las opciones en la nube han crecido de forma considerable, la realidad es que los soportes físicos siempre nos dan ese extra de confianza cuando tenemos que guardar nuestra información más sensible. 

Pese a que es habitual confiar este tipo de tareas a aquellos discos duros antiguos que tenemos en desuso y que no sabemos cómo aprovecharlos, la realidad es que esta no es la mejor idea que podemos tener si queremos estar tranquilos con los datos que hemos almacenado. Te contamos los motivos.

Cuidado con los discos duros demasiado viejos

Los discos duros, como cualquier otro dispositivo electrónico, tiene una vida útil limitada. Pese a que los fabricantes se esfuerzan en ofrecernos una cada vez mayor durabilidad, la realidad es que todos los productos electrónicos tienen un máximo de años que debemos respetar. Una vez superado el periodo comprendido entre los cinco y los ocho años, te recomendamos que extremes las precauciones sobre la información que guardas en ellos, puesto que en cualquier momento podrían dejar de funcionar.

Esto no quiere decir que no tengas que utilizarlos, pero siempre como un apoyo al resto de los soportes en los que tienes tus backups almacenados. Por ejemplo, sería interesante que tuvieras otro disco duro físico y un segundo disco duro virtual en la nube. De este modo, el disco duro más viejo podría quedar en un segundo plano y no ser la primera opción cuando tengamos un imprevisto con nuestros equipos,

Más problemas

No es únicamente el tiempo de vida el aspecto que debería preocuparnos. En los HDD antiguos, también es normal que nos encontremos con archivos corruptos que no puedan ser abiertos cuando lo necesitamos. Por lo que si utilizas este disco duro para la clásica carpeta de fotografías, quizás pierdas el acceso a ella por algún problema interno que no hayas contemplado previamente. 

A ello le debemos de sumar que en función de la antigüedad, es posible que no admite archivos demasiado grandes, por lo que tendríamos algún problema para guardar nuestros archivos multimedia. En el caso de que sí que acepte el tamaño de estos archivos, el siguiente problema tiene que ver con la velocidad de escritura. La tecnología ha evolucionado lo suficiente durante los últimos años como para darnos velocidades de escritura mucho más rápidas de las que disfrutábamos años atrás, lo que puede provocar que el traspaso de información sea más lento de lo que nos gustaría.

Cómo hemos podido comprobar, son muchas las razones que nos invitan a tener una cierta desconfianza con los discos duros demasiado antiguos. Pese a que lo más normal es que no tengamos problemas con ellos si todavía se encuentran dentro de su ciclo de vida normal, siempre está bien tener un respaldo extra para evitar posibles problemas.

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