La molesta conducta de ChatGPT que ha obligado a OpenAI a retirar la última actualización de su modelo

OpenAI presentó, en mayo del año pasado, el modelo GPT-4o para entender audio, imagen y texto de forma única, proporcionar una inteligencia más rápida, comprender y analizar las fotografías compartidas, permitir una conversación más natural en tiempo real y mejorar las capacidades en texto, voz y visión. Dicho modelo está ampliamente disponible para los usuarios, sin embargo, su última actualización presentaba un fallo que ocasionó un comportamiento "demasiado adulador y molesto" en la experiencia de uso.

Así lo compartió Sam Altman en su perfil de X (antes Twitter), donde informó a los internautas que "las últimas actualizaciones de GPT-4o han hecho que la personalidad sea demasiado molesta", no obstante, agregó que trabajarían en "correcciones adicionales para modelar la personalidad".

Para remediar esta 'incómoda' experiencia de uso, OpenAI revirtió el lanzamiento de la última actualización tanto para los usuarios gratuitos como para los usuarios suscritos a la versión Premium, a la espera de incorporar correcciones para modelar la personalidad. Además, en este sentido, la compañía de Altman matizó en un comunicado oficial que, al eliminar la actualización "excesivamente halagadora o agradable de GPT-4o", los usuarios emplearon una versión anterior con un "comportamiento más equilibrado".

Por otro lado, OpenAI probó activamente nuevas soluciones para evitar el comportamiento molesto, priorizando la satisfacción del usuario a largo plazo e introduciendo más funciones de personalización para tener un mayor control sobre el comportamiento de ChatGPT.

¿Qué le pasó exactamente a ChatGPT?

OpenAI explica en el comunicado mencionado que, en esta actualización, se centró "demasiado en los comentarios a corto plazo" y no consideró completamente "cómo evolucionan las interacciones de los usuarios con ChatGPT con el tiempo". Por lo tanto, como resultado, "GPT‑4o se inclinó hacia respuestas demasiado favorables, pero poco sinceras".

"La personalidad predeterminada de ChatGPT afecta profundamente la forma en que lo experimentas y confías en él. Las interacciones aduladoras pueden ser incómodas, inquietantes y causar angustia. No lo logramos y estamos trabajando para solucionarlo. Nuestro objetivo es que ChatGPT ayude a los usuarios a explorar ideas, tomar decisiones o visualizar posibilidades", afirma OpenAI.

Apúntate a nuestra newsletter y recibe en tu correo las últimas noticias sobre tecnología.