La NASA prueba ratones en la ISS y descubre que el espacio destruye los huesos desde dentro

Los fémures de dichos animales fueron los más afectados por la microgravedad.

May 2, 2025 - 06:34
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La NASA prueba ratones en la ISS y descubre que el espacio destruye los huesos desde dentro

¿Alguna vez te has preguntado qué le pasa al cuerpo humano cuando lleva demasiado tiempo en el espacio? Por si no lo sabías, el cuerpo de una persona sufre varios cambios debido a la ingravidez, como la atrofia muscular y ósea, alteraciones en el sistema circulatorio y el sistema inmunológico, y problemas de visión. Además, para corroborar dicha información, un estudio de la NASA revela que la estructura ósea también se ve deteriorada.

Este estudio fue protagonizado por unos ratones enviados a la Estación Espacial Internacional (ISS, por sus siglas en inglés) durante 37 días y, tras varias comprobaciones, los resultados demostraron que los fémures de dichos animales fueron los más afectados por la microgravedad.

Según los datos recogidos por la NASA y el laboratorio Blue Marble Space Institute of Science, los ratones mostraron daños estructurales en sus extremidades posteriores, además, las imágenes revelaron grandes cavidades internas en los extremos del fémur —especialmente en las zonas próximas a la articulación de la rodilla y cadera—. No obstante, la parte lumbar de la columna se mantuvo prácticamente inalterada.

Los investigadores también explican que "si la radiación o un factor sistémico fueran responsables de la pérdida ósea, lo normal sería encontrar alteraciones generalizadas". Por ende, dichos expertos llegaron a la conclusión de que este problema podría afectar al ser humano en sus próximas misiones al espacio, ya que una travesía de larga duración perjudicaría a aquellos huesos con mayor influencia de peso.

¿Le pasaría lo mismo a los humanos?

Se estima que el ser humano pierde un 1% de su capacidad ósea por cada mes en el espacio y, desafortunadamente, otro estudio indica que la estructura ósea no se recupera.

Además, uno de los descubrimientos más preocupantes del estudio realizado por la NASA es que los ratones jóvenes empezaron a mostrar osificación prematura, es decir, un proceso en el que el cartílago se convierte en hueso antes de lo habitual y termina afectando al desarrollo esquelético futuro.

Por lo tanto, para contrarrestar dicha situación, ahora, la NASA investiga si el ejercicio físico o los sistemas de resistencia mecánica pueden frenar la pérdida de masa ósea en las misiones prolongadas al espacio.

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