Sam Altman retrasa el generador de imágenes en la versión gratis de ChatGPT: "Nuestras GPU se están derritiendo"

Desde hace unos días, las redes sociales se han llenado de ilustraciones oníricas: retratos al estilo Studio Ghibli, mascotas convertidas en personajes de anime, escenas históricas reinterpretadas como si salieran de una película de Hayao Miyazaki. Todo gracias a una nueva función de ChatGPT que permite generar imágenes directamente desde el chatbot, una herramienta impulsada por el modelo multimodal GPT-4o y que en España está causando un gran éxito, llenando los feeds de cientos de usuarios.

La idea era sencilla: integrar el generador de imágenes dentro del flujo de conversación habitual de ChatGPT, sin necesidad de usar herramientas externas como DALL·E o Midjourney. Los usuarios solo tienen que describir lo que quieren ver o subir una imagen que sirva de referencia. El resultado: una avalancha de peticiones que ha desbordado por completo a OpenAI.

Tanto que Sam Altman, CEO de la compañía, ha salido al paso de la saturación con una explicación tan clara como honesta: “Nuestras GPU se están derritiendo”. La popularidad de esta nueva función ha sido tal que OpenAI ha decidido retrasar su despliegue completo en la versión gratuita de ChatGPT, imponiendo límites temporales para contener la demanda.

Solo tres imágenes al día para la versión gratuita

Inicialmente, OpenAI había anunciado que esta función estaría disponible para todos los usuarios: tanto los de pago (Plus, Pro y Team), como los del plan gratuito. Sin embargo, a solo 48 horas del lanzamiento, la empresa ha tenido que pisar el freno. Según ha explicado Altman en su cuenta de X (antes Twitter), los usuarios gratuitos solo podrán generar tres imágenes por día, al menos mientras dure esta fase de ajuste.

“Vamos a introducir temporalmente algunos límites de velocidad mientras trabajamos para hacerlo más eficiente. ¡Esperamos que no pase mucho tiempo!”, ha escrito el CEO.

Además del colapso por exceso de uso, OpenAI ha detectado errores en el filtrado de contenidos: algunas imágenes están siendo bloqueadas por error, incluso cuando no infringen las normas. “Estamos rechazando algunas generaciones que deberían estar permitidas; estamos solucionándolas lo más rápido que podemos”, ha admitido Altman.

La fiebre de las imágenes estilo Ghibli

Una de las claves del éxito viral de esta función ha sido su capacidad para imitar estilos artísticos fácilmente reconocibles, especialmente el del Studio Ghibli. Aunque el sistema no debería permitir la generación explícita de imágenes que copien a artistas vivos o estudios protegidos por derechos de autor, muchos usuarios han conseguido crear retratos y escenas con una estética casi calcada a la de estas películas de anime.

Esta popularidad ha abierto también un debate sobre el uso de la inteligencia artificial para replicar estilos artísticos sin permiso, algo que preocupa a creadores, ilustradores y estudios de animación. Mientras tanto, el entusiasmo de los usuarios no parece frenarse. Incluso el propio Altman ha cambiado su foto de perfil en X.

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